Penny Barber está frustrada porque su hijastro, Ricky Spanish, ha estado peleando con todos los miembros de la familia recién fusionada últimamente. Cuando ella lo confronta, Ricky finalmente admite que solía recibir toda la atención que quería, por lo que no está acostumbrado a tener que compartir atención con los demás. Ella lo abraza contra su pecho y finalmente se quita el suéter y el sostén para que la experiencia sea más cómoda para él. Pero ambos disfrutan tanto de la experiencia de unión que acaba desembocando en un encuentro muy sensual y sexual.