Un chico tan descarado - Rachael Cavalli

El dueño de la tienda decidió dejar ir a Ricky con una advertencia, pero los problemas de Ricky aún no han terminado, porque Rachael está muy enojada con él por portarse mal. Intenta protestar, pero Rachael lo interrumpe, acusándolo de responderle. Ricky hace otro intento de explicar, pero Rachael una vez más lo interrumpe y le dice que acepte su castigo. Ricky acepta dócilmente, por lo que ella le da una rápida paliza y exige una disculpa. Pero Ricky sigue tratando de explicarse, lo que lleva a Rachael a agarrar su polla y llevarlo al dormitorio para recibir más castigo.